Cuesta entender lo que pasó ayer, pero los ánimos en general parecen demasiado caldeados alrededor de un tema viejo, y que parecía superado. Los convocantes de la manifestación contra la financiación pública de la visita de Ratzinger a España, en su doble calidad de jefe de estado y líder de una Iglesia, se esforzaron en explicar desde el principio que ésta no es una manifestación "anticatólica", ni siquiera "antipapa"; no en vano entre los convocantes (140 asociaciones) había numerosos grupos cristianos. "Así, no", es el mensaje principal que la mani quería dar de partida.
En Madrid, al parecer, la manifestación se extendió demasiado en su paso por Sol, y no se disolvió donde debía, en Tirso de Molina , debido a la descoordinación de much@s y a los ánimos calientes de otr@s. Los manifestantes "laicos" se encontraron al llegar a Sol con contramanifestantes cristianos, y la imagen resultante no es bonita: aquí, vídeo de El País en el que se ven los enfrentamientos entre un@s y otr@s antes de la inesperada carga policial. Las imágenes de la carga policial son fáciles ya de encontrar por google, y abajo os pongo algunos links.
La manifestación en Valencia fue pacífica, aunque ya durante el vía crucis que se realizó por la calle de Las Barcas, con estaciones de paro frente a cada sucrusal bancaria, presencié un pequeño enfrentamiento entre una mujer y un cura; digo que el enfrentamiento era pequeño porque básicamente era una cosa de a dos, pero el nivel de los gritos era enorme. Me parecía que la bronca no tenía nada que ver con lo que estábamos pidiendo, con lo que pide 15M, pero no puedo sacármelo de la cabeza ni al día siguiente; hay algo muy siniestro en ese retorno de las cosas pasadas.
15M me parece justo lo contrario, un cambio, una novedad, aunque no seamos l@s primer@s revolucionari@s ni l@s primer@s que piden más equidad, más justicia; por otro lado hay, entre los millones de personas que participan en el movimiento, algun@s más lastrados por el pasado que otr@s; hay mucha gente mayor de la izquierda antigua -y no tan izquierda- que debaten entre ellos sobre qué funcionó y qué no funcionó de su actividad hace 30 años (y más); nosotr@s aprendemos de ell@s, pero intentamos buscar opciones nuevas para este cambio que necesitamos, este cambio que, en cualquier caso, está ocurriendo.
La violencia entre ambas manis en Madrid, si bien quiero creer que fue minoritaria, parece vieja, rancia, tan pasada como muchas de las cosas contra las que protestamos y frente a las que hacemos propuestas nuevas: no es que la democracia esté vieja, pero sí el modo de hacer política, el sistema de castas que son los partidos, incluso aquell@s que nos vienen gobernando sin pausa desde hace 30 años -en España- . Y también parece antiguo el deseo de "asesinar maricones en la manifestación laica", que expresó el voluntario de las jornadas de la juventud que planeaba un ataque químico [ http://www.elmundo.es/elmundo/2011/08/17/espana/1313576322.html#comentarios y http://www.publico.es/espana/391819/a-matar-maricones-durante-sus-manifestaciones-en-contra-de-la-iglesia-catolica ]. También antiguo es la expresión citada en El País que empleó el mando de las fuerzas de seguridad para cargar contra los manifestantes: "“Basta de mariconadas, sacad las porras y lo que haga falta”" en http://politica.elpais.com/politica/2011/08/18/actualidad/1313619651_039448.html .
Y es que el cambio está aquí. 15M es un cambio, pero sólo uno más dentro de los cambios que se están dando y se darán en todo el planeta . Visto lo visto en otras partes, es además una buena opción de cambio, porque el pacifismo que sigue usando como bandera es sin duda preferible a la irracionalidad de las protestas en Londres, o el rearme que se está produciendo en la extrema derecha (cristiana), a juzgar por los casos minoritarios también de España esta semana y Noruega hace dos. No parece achacable a los manifestantes Sirios las matanzas que Assad está provocando en su pueblo (por cierto, el gobierno español ha ofrecido asilo político a él y a su familia), y que ayer fueron muy sangrientas.
Si las peticiones del 15M tienen el respaldo de casi el 80% de l@s ciudadan@s españoles, nuestr@s polític@s harían bien en escucharlas, en atenderlas. Se están pidiendo cambios claros, que afectan a ese palíndromo que es la economía ligada a la política (ese ying y yang de la vida social) y se está haciendo de manera pacífica; cuando dicen que no pedimos cosas concretas quieren decir que no las estamos pidiendo como quieren que las pidamos, por sus cauces diseñados para mantener toda la capacidad de decisión en sus manos: por ejemplo, por medio de una Iniciativa de Ley Popular, que no llegue ni a debatirse en el Congreso -como todas todas todas las que se han iniciado en democracia- o fundando un partido político, que en las próximas elecciones de noviembre no pueda presentarse por falta de avales merced a la nueva ley electoral aprobada en enero sin que la ciudadanía se haya enterado.
Lo contrario, llevará cada vez más a extremismos: cuando la mayoría de la población (la gran mayoría, y una mayoría parlamentaria que después de trillado el trigo sólo representa en cada partido político grande al 15% de los ciudadanos) está de acuerdo en algo, si sus políticos les dan la espalda están dando carta libre para que l@s más radicales decidan que, ante la impotencia de cualquier otro medio, se tomen la justicia por su mano. Lo estamos viendo en otros países de nuestro entorno: hemos visto Londres y, con menos profusión informativa, hemos visto Philadelphia.
Asusta pensar qué pasará si, como están pidiendo Francia y Alemania esta semana, llega el momento en que debamos "tocar" nuestra constitución para añadir a nuestra carta magna una limitación del gasto público por ley, para cuadrar con el nuevo gobierno económico europeo que proponen (lo que hace unos años parecía deseable, de pronto parece una pesadilla). Asusta pensar en cómo estarán los ánimos entonces, si la política sigue dando la espalda a la ciudadanía (como si el país fuera suyo, exclusivamente, de estas "200 personas" (cito a Rubalcaba) que se sientan (de vez en cuando) en los escaños de los diputados. Asusta pensar en qué pasará si tocan la constitución para esto pero no para hablar de la monarquía (aunque sea para ver cómo queda lo de la igualdad de género en lo de la línea sucesoria), para las reformas electorales, la relación con la iglesia, o si les diera por quitar además esas incómodas proclamas al derecho de tod@s l@s ciudadan@s a una vivienda, empleo y vida dignas.
Pero pasado el primer susto, respiramos. Se dice que valiente es quien, teniendo miedo, enfrenta aquello que teme. Lo contrario es, o un cobarde, o un inconsciente . Y en twitter, para enterarnos de qué está pasando, usamos a menudo el tag #notenemosmiedo, cada vez que hay palos. Así que, seguimos: aplicando el cuento a la visita papal, seguimos pidiendo MÁS TRANSPARENCIA Y MAYOR CONTROL DE LA CIUDADANÍA DE LAS DECISIONES POLÍTICAS Y DE LOS GASTOS DE DINERO PÚBLICO; no bastan las palabras de José Blanco diciendo que la visita del papa no costará ni un euro, queremos todos los datos. Queremos TRANSPARENCIA PARA SABER QUIÉN ORDENÓ LA CARGA POLICIAL DE ANOCHE, y QUEREMOS MAYOR PARTICIPACIÓN, POR EJEMPLO, TAMBIÉN EN LAS DECISIONES SOBRE LOS PRIVILEGIOS -socioeconómicos- QUE LA IGLESIA CATÓLICA PUEDA TENER. Ya hemos hablado mucho de los privilegios, que significan un trato especial, fuera de la ley general. Nuestr@s polític@s harían bien en escuchar estas peticiones simples que viene expresando Democracia Real Ya desde hace meses: más participación y más control ciudadano, acceso directo a toda la información -seguimos siendo el único país europeo de gran tamaño sin ley de transparencia- y más modos de acceder a nuestras instituciones -una reforma de ley electoral que sea realmente equitativa, reforma de la ley de Iniciativas populares-.
¿Qué tienen miedo de enseñar? ¿Por qué tienen miedo de que hablemos, de que nos manifestemos, de que se nos vea? ¿No era esto (la democracia) así en teoría? Que paren y respiren, que dejen de ejecutar leyes que no han explicado, cambios "estructurales" (esto es, de la esencia, del esqueleto, del orden,de cómo funciona nuestro país) que no han refrendado, que no ofrecían -ni ofrecerán en las próximas elecciones- como programa. Ante el miedo, dicen sociólog@s, psicólog@s y biólog@s, hay dos respuestas básicas: la huida o el ataque. Nuestr@s polític@s emprenden el ataque contra su ciudadanía a la vez que agachan la cabeza ante "los mercados". Han huído de las instituciones que representan dejando en los escaños meras sombras, los fantasmas de lo que fueron, o la estela de movimiento que dejan los personajes en los dibujos animados cuando salen corriendo.
Pero nosotr@s no tenemos miedo. O si lo tenemos, vamos a enfrentarlo. Porque lo que hay en juego es más miedo, más situaciones terroríficas si no lo hacemos. Por todo ello seguimos manifestándonos, y como cada vez que hay una carga policial, insistiremos en el pacifismo; noviembre y las elecciones serán una parada más del via crucis que significa que nuestras peticiones no son atendidas, pero seguiremos. Hoy, en Valencia por ejemplo, nos reuniremos a las 20 horas para mostrar nuestra repulsa a la carga policial de ayer, para exigir responsabilidades y, otra vez, transparencia. Porque cuesta saber qué pasó.
Recuentos:
El periodista de El País Manuel Cuellar estuvo twitteando su confusión y fue retenido por la policía; hasta el final no entendió nada, pero su último mensaje fue esta reflexión ""Esto ha ocurrido en mitad d agosto y con un pedazo de partido televisado. Q pasará cuando esté todo Madrid aquí? #17A "" ( http://twitter.com/#!/Manuelcuellar ) ; otra periodista escribe en su muro de facebook el miedo que ha sentido ante lo desconocido: ¿por qué nos golpean, por manifestarnos, a quienes pagamos para que nos protejan? Termina su exposición personal diciendo "Confío plenamente en las ciudadanas y ciudadanos que han sentido como yo las patadas morales y físicas de nuestro Gobierno. Esto va en serio. Y ahora me tienen plenamente enfrente. Lo juro por mi conciencia, que sigue intacta" [ https://www.facebook.com/notes/lidia-ucher/los-palos-gratis-de-la-poli/10150350528869789 y su vídeo
Y os recomiendo muy mucho este artículo de Stéphane Grueso sobre qué paso antes, durante y tras la mani, porque también hace autocrítica de algunos aspectos de la mani laica, e ilustra el texto con muchos vídeos y fotos que no están en otros lugares (porque los tomó él mismo) : http://stephanegrueso.blogspot.com/2011/08/la-manifestacion-laica-del-17-lo-bueno.html
15M es un cambio, pero no es un cambio absoluto ni independiente de otros cambios que se están dando . Por supuesto, se da dentro del cambio mayor que representa esta crisis que no terminamos de saber cómo empezó pero que intuimos empezó con aquellos a los que está beneficiando (¡transparencia!¡control ciudadano!). Este cambio se da a la vez que otros, como el islandés, como los del norte de África, como los que cada vez son más habituales en China y Estados Unidos. El cambio "menor" que es 15M significa una opción hacia una búsqueda de una salida pacífica a los cambios "mayores" que vivimos; estamos viendo en otros lados que no es la única opción. Los cambios también son esperanzadores, y si seguimos saliendo a la calle no es para encontrar bronca, ni queremos que sea sólo siguiendo un patrón de acción-reacción: creemos en lo que pedimos, y seguiremos haciéndolo.
Hoy, 20 horas, en la plaza grande de cada ciudad (en Valencia, en firme, en la plaza del 15 de mayo -antes, del ayuntamiento-. Confirma en la web-twitter-facebook de tu asamblea más cercana, por si acaso).
Lee, participa, difunde, haz circular la información contrastada, por favor!
* E
En Madrid, al parecer, la manifestación se extendió demasiado en su paso por Sol, y no se disolvió donde debía, en Tirso de Molina , debido a la descoordinación de much@s y a los ánimos calientes de otr@s. Los manifestantes "laicos" se encontraron al llegar a Sol con contramanifestantes cristianos, y la imagen resultante no es bonita: aquí, vídeo de El País en el que se ven los enfrentamientos entre un@s y otr@s antes de la inesperada carga policial. Las imágenes de la carga policial son fáciles ya de encontrar por google, y abajo os pongo algunos links.
La manifestación en Valencia fue pacífica, aunque ya durante el vía crucis que se realizó por la calle de Las Barcas, con estaciones de paro frente a cada sucrusal bancaria, presencié un pequeño enfrentamiento entre una mujer y un cura; digo que el enfrentamiento era pequeño porque básicamente era una cosa de a dos, pero el nivel de los gritos era enorme. Me parecía que la bronca no tenía nada que ver con lo que estábamos pidiendo, con lo que pide 15M, pero no puedo sacármelo de la cabeza ni al día siguiente; hay algo muy siniestro en ese retorno de las cosas pasadas.
15M me parece justo lo contrario, un cambio, una novedad, aunque no seamos l@s primer@s revolucionari@s ni l@s primer@s que piden más equidad, más justicia; por otro lado hay, entre los millones de personas que participan en el movimiento, algun@s más lastrados por el pasado que otr@s; hay mucha gente mayor de la izquierda antigua -y no tan izquierda- que debaten entre ellos sobre qué funcionó y qué no funcionó de su actividad hace 30 años (y más); nosotr@s aprendemos de ell@s, pero intentamos buscar opciones nuevas para este cambio que necesitamos, este cambio que, en cualquier caso, está ocurriendo.
La violencia entre ambas manis en Madrid, si bien quiero creer que fue minoritaria, parece vieja, rancia, tan pasada como muchas de las cosas contra las que protestamos y frente a las que hacemos propuestas nuevas: no es que la democracia esté vieja, pero sí el modo de hacer política, el sistema de castas que son los partidos, incluso aquell@s que nos vienen gobernando sin pausa desde hace 30 años -en España- . Y también parece antiguo el deseo de "asesinar maricones en la manifestación laica", que expresó el voluntario de las jornadas de la juventud que planeaba un ataque químico [ http://www.elmundo.es/elmundo/2011/08/17/espana/1313576322.html#comentarios y http://www.publico.es/espana/391819/a-matar-maricones-durante-sus-manifestaciones-en-contra-de-la-iglesia-catolica ]. También antiguo es la expresión citada en El País que empleó el mando de las fuerzas de seguridad para cargar contra los manifestantes: "“Basta de mariconadas, sacad las porras y lo que haga falta”" en http://politica.elpais.com/politica/2011/08/18/actualidad/1313619651_039448.html .
Y es que el cambio está aquí. 15M es un cambio, pero sólo uno más dentro de los cambios que se están dando y se darán en todo el planeta . Visto lo visto en otras partes, es además una buena opción de cambio, porque el pacifismo que sigue usando como bandera es sin duda preferible a la irracionalidad de las protestas en Londres, o el rearme que se está produciendo en la extrema derecha (cristiana), a juzgar por los casos minoritarios también de España esta semana y Noruega hace dos. No parece achacable a los manifestantes Sirios las matanzas que Assad está provocando en su pueblo (por cierto, el gobierno español ha ofrecido asilo político a él y a su familia), y que ayer fueron muy sangrientas.
Si las peticiones del 15M tienen el respaldo de casi el 80% de l@s ciudadan@s españoles, nuestr@s polític@s harían bien en escucharlas, en atenderlas. Se están pidiendo cambios claros, que afectan a ese palíndromo que es la economía ligada a la política (ese ying y yang de la vida social) y se está haciendo de manera pacífica; cuando dicen que no pedimos cosas concretas quieren decir que no las estamos pidiendo como quieren que las pidamos, por sus cauces diseñados para mantener toda la capacidad de decisión en sus manos: por ejemplo, por medio de una Iniciativa de Ley Popular, que no llegue ni a debatirse en el Congreso -como todas todas todas las que se han iniciado en democracia- o fundando un partido político, que en las próximas elecciones de noviembre no pueda presentarse por falta de avales merced a la nueva ley electoral aprobada en enero sin que la ciudadanía se haya enterado.
Lo contrario, llevará cada vez más a extremismos: cuando la mayoría de la población (la gran mayoría, y una mayoría parlamentaria que después de trillado el trigo sólo representa en cada partido político grande al 15% de los ciudadanos) está de acuerdo en algo, si sus políticos les dan la espalda están dando carta libre para que l@s más radicales decidan que, ante la impotencia de cualquier otro medio, se tomen la justicia por su mano. Lo estamos viendo en otros países de nuestro entorno: hemos visto Londres y, con menos profusión informativa, hemos visto Philadelphia.
Asusta pensar qué pasará si, como están pidiendo Francia y Alemania esta semana, llega el momento en que debamos "tocar" nuestra constitución para añadir a nuestra carta magna una limitación del gasto público por ley, para cuadrar con el nuevo gobierno económico europeo que proponen (lo que hace unos años parecía deseable, de pronto parece una pesadilla). Asusta pensar en cómo estarán los ánimos entonces, si la política sigue dando la espalda a la ciudadanía (como si el país fuera suyo, exclusivamente, de estas "200 personas" (cito a Rubalcaba) que se sientan (de vez en cuando) en los escaños de los diputados. Asusta pensar en qué pasará si tocan la constitución para esto pero no para hablar de la monarquía (aunque sea para ver cómo queda lo de la igualdad de género en lo de la línea sucesoria), para las reformas electorales, la relación con la iglesia, o si les diera por quitar además esas incómodas proclamas al derecho de tod@s l@s ciudadan@s a una vivienda, empleo y vida dignas.
Pero pasado el primer susto, respiramos. Se dice que valiente es quien, teniendo miedo, enfrenta aquello que teme. Lo contrario es, o un cobarde, o un inconsciente . Y en twitter, para enterarnos de qué está pasando, usamos a menudo el tag #notenemosmiedo, cada vez que hay palos. Así que, seguimos: aplicando el cuento a la visita papal, seguimos pidiendo MÁS TRANSPARENCIA Y MAYOR CONTROL DE LA CIUDADANÍA DE LAS DECISIONES POLÍTICAS Y DE LOS GASTOS DE DINERO PÚBLICO; no bastan las palabras de José Blanco diciendo que la visita del papa no costará ni un euro, queremos todos los datos. Queremos TRANSPARENCIA PARA SABER QUIÉN ORDENÓ LA CARGA POLICIAL DE ANOCHE, y QUEREMOS MAYOR PARTICIPACIÓN, POR EJEMPLO, TAMBIÉN EN LAS DECISIONES SOBRE LOS PRIVILEGIOS -socioeconómicos- QUE LA IGLESIA CATÓLICA PUEDA TENER. Ya hemos hablado mucho de los privilegios, que significan un trato especial, fuera de la ley general. Nuestr@s polític@s harían bien en escuchar estas peticiones simples que viene expresando Democracia Real Ya desde hace meses: más participación y más control ciudadano, acceso directo a toda la información -seguimos siendo el único país europeo de gran tamaño sin ley de transparencia- y más modos de acceder a nuestras instituciones -una reforma de ley electoral que sea realmente equitativa, reforma de la ley de Iniciativas populares-.
¿Qué tienen miedo de enseñar? ¿Por qué tienen miedo de que hablemos, de que nos manifestemos, de que se nos vea? ¿No era esto (la democracia) así en teoría? Que paren y respiren, que dejen de ejecutar leyes que no han explicado, cambios "estructurales" (esto es, de la esencia, del esqueleto, del orden,de cómo funciona nuestro país) que no han refrendado, que no ofrecían -ni ofrecerán en las próximas elecciones- como programa. Ante el miedo, dicen sociólog@s, psicólog@s y biólog@s, hay dos respuestas básicas: la huida o el ataque. Nuestr@s polític@s emprenden el ataque contra su ciudadanía a la vez que agachan la cabeza ante "los mercados". Han huído de las instituciones que representan dejando en los escaños meras sombras, los fantasmas de lo que fueron, o la estela de movimiento que dejan los personajes en los dibujos animados cuando salen corriendo.
Pero nosotr@s no tenemos miedo. O si lo tenemos, vamos a enfrentarlo. Porque lo que hay en juego es más miedo, más situaciones terroríficas si no lo hacemos. Por todo ello seguimos manifestándonos, y como cada vez que hay una carga policial, insistiremos en el pacifismo; noviembre y las elecciones serán una parada más del via crucis que significa que nuestras peticiones no son atendidas, pero seguiremos. Hoy, en Valencia por ejemplo, nos reuniremos a las 20 horas para mostrar nuestra repulsa a la carga policial de ayer, para exigir responsabilidades y, otra vez, transparencia. Porque cuesta saber qué pasó.
Recuentos:
El periodista de El País Manuel Cuellar estuvo twitteando su confusión y fue retenido por la policía; hasta el final no entendió nada, pero su último mensaje fue esta reflexión ""Esto ha ocurrido en mitad d agosto y con un pedazo de partido televisado. Q pasará cuando esté todo Madrid aquí? #17A "" ( http://twitter.com/#!/Manuelcuellar ) ; otra periodista escribe en su muro de facebook el miedo que ha sentido ante lo desconocido: ¿por qué nos golpean, por manifestarnos, a quienes pagamos para que nos protejan? Termina su exposición personal diciendo "Confío plenamente en las ciudadanas y ciudadanos que han sentido como yo las patadas morales y físicas de nuestro Gobierno. Esto va en serio. Y ahora me tienen plenamente enfrente. Lo juro por mi conciencia, que sigue intacta" [ https://www.facebook.com/notes/lidia-ucher/los-palos-gratis-de-la-poli/10150350528869789 y su vídeo
Y os recomiendo muy mucho este artículo de Stéphane Grueso sobre qué paso antes, durante y tras la mani, porque también hace autocrítica de algunos aspectos de la mani laica, e ilustra el texto con muchos vídeos y fotos que no están en otros lugares (porque los tomó él mismo) : http://stephanegrueso.blogspot.com/2011/08/la-manifestacion-laica-del-17-lo-bueno.html
15M es un cambio, pero no es un cambio absoluto ni independiente de otros cambios que se están dando . Por supuesto, se da dentro del cambio mayor que representa esta crisis que no terminamos de saber cómo empezó pero que intuimos empezó con aquellos a los que está beneficiando (¡transparencia!¡control ciudadano!). Este cambio se da a la vez que otros, como el islandés, como los del norte de África, como los que cada vez son más habituales en China y Estados Unidos. El cambio "menor" que es 15M significa una opción hacia una búsqueda de una salida pacífica a los cambios "mayores" que vivimos; estamos viendo en otros lados que no es la única opción. Los cambios también son esperanzadores, y si seguimos saliendo a la calle no es para encontrar bronca, ni queremos que sea sólo siguiendo un patrón de acción-reacción: creemos en lo que pedimos, y seguiremos haciéndolo.
Hoy, 20 horas, en la plaza grande de cada ciudad (en Valencia, en firme, en la plaza del 15 de mayo -antes, del ayuntamiento-. Confirma en la web-twitter-facebook de tu asamblea más cercana, por si acaso).
Lee, participa, difunde, haz circular la información contrastada, por favor!
* E
No hay comentarios:
Publicar un comentario